Elqui Burgos: “El creador, el rebelde con su tiempo y su sociedad, romperá toda censura, toda manipulación ideológica hegemónica. El creador aprovecha toda innovación tecnológica, científica, cultural.”
-Muchos poetas suelen tener una imagen poética primera. Algo así como el primer recuerdo relacionado con la poesía, un escenario poético, una visión... ¿de tenerla, cuál es la tuya?
Un hombre camina en el desierto, solo y abandonado, persiguiendo, soñando, un
espejismo: esta imagen del destino humano, aparece, desde que empecé a
escribir, en mis poemas. Y, siempre me he preguntado el por qué. Algunas veces me digo, fue
influencia de mis lecturas, de las vidas ejemplares de santos anacoretas, que leía en la
infancia. En otras ocasiones, recuerdo que aún niño había concertado con mis amigos faltar a
clases, para ir a la pampa, fuera de la ciudad, a jugar fútbol. Sucedió que nadie faltó a clases,
yo fui el único, así me encontré, solo y abandonado, matando el tiempo en el desierto, sin
poder ir a la escuela ni regresar a casa. Bueno, al final, lo más evidente es que uno escribe
con todos los fantasmas que lo habitan, con todas sus tripas al aire.
-Cómo fue el proceso de escritura de tu primer libro. Publicaste poemas en revistas previamente, cómo lo financiaste.
Yo rindo culto a la amistad, siempre fui un ferviente miembro de los grupos y talleres de poesía. Fui miembro de Estación reunida y de Hipócrita léctor. Ahí, en esas revistas publiqué mis primeros poemas. Como tú bien sabes, uno también empieza a escribir por complicidad con los amigos, con ellos uno descubre y comparte un mundo nuevo; la vida se llena de aventuras, discutíamos en los pasillos de la universidad los acontecimientos culturales, políticos del momento, con el aliento de la ya famosa delantera poética sanmarquina ( Carlos Germán Belli, Washington Delgado, Francisco Bendezú, Javier Sologuren y Pablo Guevara), luego, continuábamos vagando por calles y bares, hasta altas horas de la noche, siempre discutiendo, siempre peleándonos, defendiendo un libro o el último poema que habíamos escrito.
-¿Qué opinas de los concursos de poesía? ¿Participas de ellos? ¿Crees que es esencial para hacer lo que llaman una "carrera poética"?
A los concursos literarios hay que tomarlos con la distancia necesaria, siempre son un incentivo, te ayudan a corregir, a poner en limpio tus papeles. Además, como también intervienen factores no solamente literarios, es como jugar a la lotería. No me gusta pensar en una "carrera literaria", me parece lo más antipoético, pues uno estudia una carrera para ganarse un buen salario. Yo no me gano mi vida con la poesía; simple animal humano que soy, yo solo creo y construyo mi humanidad.
-En términos generales, desde la segunda mitad del siglo veinte la gran influencia de la poesía latinoamericana se desplazó de la poesía española hacia los clásicos del idioma inglés (Eliot, Pound, otros). ¿Cuáles crees que son las influencias actuales?
De jóvenes, buscamos nuestro camino. Novatos, tratamos de situarnos en el contexto literario en el que te inscribes, en el que participas, buscando tu voz. Pero cada época tiene sus desafíos, en la mía se dio ese movimiento generacional, la influencia de la poesía española daba paso a la poesía anglosajona. A mi edad, mi búsqueda es individual, muy personal, pienso que es la hora en que tu poesía revela la persona que quisiste ser, ya no tendré, ya no tendremos otra oportunidad.
-Cuáles son para ti los poetas vivos más importantes de tu país y por qué?
Los poetas vivos más importantes de mi país son precisamente los que están vivos. De ellos aún espero algún verso nuevo, algún cuento, novela o pintura, sobre todo de mis amigos, que iluminen mi vida. Sin ellos, sin la generosidad inmensa de mis amigos, jamás hubiese podido escribir un solo verso. A los muertos, los guardo en el corazón.
-¿Qué opinas de las opciones poéticas metaescriturales, digamos poesía sonora, poesía visual, etc?
Qué se abran mil caminos, que se ame mil flores, cualquier búsqueda es válida en sí misma. No tiene sentido escribir como otro, vivir como otro. Eres tú el que crea tu propia obra, tu propia humanidad.
-En tu opinión cuál es la relación entre el poeta y el ejercicio de la crítica literaria. ¿Crees que la mirada crítica es importante para el poeta de hoy?
Los grandes escritores siempre reflexionan sobre su quehacer literario. Algunas veces formalizan sus poéticas; en otras ocasiones, las deducimos, por alguna declaración o por su obra misma. Es todo un proceso permanente de reflexión y sobre todo de autocrítica. Sabemos, también, que el creador, el poeta, busca el poema perfecto, que indudablemente nunca lo escribirá. Una poética no es una receta de cocina, los códigos están para ser transgredidos. Pero el poeta no vive en el aire, aislado. Nosotros construimos nuestra identidad con la mirada del otro, sin la mirada crítica del otro caeríamos en un terrible solipsismo, en un malsano egocentrismo. Sin embargo, el poeta seguirá soñando con el poema ideal, como sueña con la mujer que puebla sus sueños.
-Internet ha propiciado o, por lo menos, ha revelado una difusión y práctica inusitada de la poesía. Cada vez hay más poetas en todos lados y ya casi se pierde en el relativismo el ejercicio poético. ¿Crees que no se puede decir a nadie que no es poeta o consideras necesario establecer un rasero, un parámetro?
¿Quiénes somos para imponer a la imaginación una norma, un límite, una verdad? El creador, el rebelde con su tiempo y su sociedad, romperá toda censura, toda manipulación ideológica hegemónica. El creador aprovecha toda innovación tecnológica, científica, cultural, sobre todo ahora que vivimos un cambio de civilización. Con el desarrollo de la tecnología numérica ( ¡Oh hada cibernética!), de la biología y de la inteligencia artificial, empezamos a hablar de Transhumanismo, es decir, de un hombre más que humano.
-¿Cuánto tiempo dedicas a la escritura y a la lectura? ¿Los practicas diariamente o te sometes a los dictados de la inspiración?
Yo solo me dedico a vivir mi vida, esta simple vida, muy tierra a tierra, sin esperanzas en otro mundo. La poesía y la lectura no son actividades suplementarias, una diversión dominical. Esa tinta negra de cada palabra es mi sangre, la única huella que de mí quedará, hasta que olvido llegue.
-Si quieres puedes compartir un inédito.
H + ?
tengo la maldita sospecha
que he desperdiciado mi vida
en la palabra
viejo edificio
roído por las ratas
y no me hablen de fraternidad
con los vencidos
para justificar el pillaje de los pueblos
la vida como la vivimos
se derrumba
y yo llevo en el pecho
la flor azul de los utopistas
otros reinos futuros
son los que ambiciono
otra humanidad nos espera
/ otras galaxias
quiero un cerebro más rápido que 1000 computadoras
un corazón que se emocione
pero que no sangre
el dolor es demasiado humano
¿ un hombre nuevo
ya veo cómo mi brazo piensa solo
a ciencia nueva ?
cómo hago justicia apoyando un botón
una real vida
de sueño cibernético
repartiremos casas a los sin techo
vestiremos a los desnudos
y daremos de comer a los hambrientos
¿ rezagos de una moral del pasado ?
bueno / bueno
¿ qué dios de aire florecerá
quiero un alma electrónica
mi querido lucrecio
buena cuando sea bueno
de mi cuerpo trozado
y mala si fuera necesario
con su válvula artificial
buena salud
y su inmenso
con mi nuevo hígado implantado
saber electrónico ?
una vida no me basta
quiero la inmortalidad
¡ qué importa si no comprendo !
la máquina
que ahora soy